domingo, 20 de marzo de 2011

Rechazado, rechazar me rechazo.


Rechazado, rechazar, me rechazo.

                Pocas cosas en el mundo duelen más que esto, existe una sensación desgarradora que te congela el alma y llena tus ojos de lagrimas, es una sensación penetrante que no se quita fácilmente y es tan pero tan inolvidable como cualquier primera vez, es un nudo en la garganta, es el deseo de no existir, es el deseo de no ser quien eres, el deseo de preguntarle a Dios ¿Por qué soy así? Es uno de nuestros miedos más grandes, es el rechazo.

                A todos o la mayoría le ha sucedido, en al menos de una de sus maneras soy rechazado, me atrevo a rechazar o me rechazo a mi mismo aun que todo parezca estar bien. Somos rechazados por todo por nuestro color de piel, por nuestra nacionalidad, por nuestra forma de ser, por con quienes estamos, por nuestro rostro, por nuestro cuerpo, por nuestra inteligencia, por algún defecto en especial o por como lucimos generalmente por algo superficial sin importar cuál sea la realidad de la razón por la que somos rechazados por si soy alto o bajo delgado o con sobrepeso eso no hace que duela menos cuando nos tratan mal y nos apartan y nos excluyen, es como ver a la soledad riéndose de ti y de tus defectos.

                Y te sientes tan mal es como una enfermedad, aparentas no darle importancia decir “no me importa lo que piensen” cuando en el fondo se te está abriendo el corazón desde el centro porque de la manera más fría alguien te excluyo como si fueras inferior por tus diferencia, es tan doloroso e injusto el ver como personas rechazan a otros olvidando por completo que todos nacimos iguales y el verdadero valor del ser humano se mide por su corazón no por su apariencia.

Se ve en tantos lugares, podrías verlo en grupo de chicas que buscan empleo y solo seleccionan a aquella con el mejor cuerpo por que vieron más importante un par de piernas que su intelecto, o de un grupo de jóvenes que presentan una prueba para aquellos con peor comportamiento se les es más severo por como son sin primero preguntarse ¿Por qué son asi? Y ¿Quiénes son realmente en su corazón? Juzgamos sin pensar en lo demás y nos basamos en lo primero que vemos para rechazar a los demás como si los otros no fueran nada y no fueran a nosotros igual, se atreve un hombre a rechazar a otro por su color, se atreve un mujer a rechazar a otra por su rostro, nos atrevemos a rechazar a otros por cualquier razón cuando en realidad no hay motivos dime quien te autorizo quien te dio permiso para discriminar a otros y volverlo un excluido.


Nos sentimos tan mal que terminamos rechazándonos a nosotros mismos, hayamos defectos en donde no los hay y aquellas cosas que nos diferencian de los demás que son virtudes las volvemos algo negativo no nos valoramos a nosotros mismos y nos empezamos a dañar nos rechazamos cuanto podemos y decimos ¿Dios por qué? Sin pensar si quiera un segundo en que así tal y como somos, somos perfectos.

En nuestra vida encontramos cientos de personas que nos rechazan por mil excusas palabras sin valor destinadas a hacer daño pero a mí el que me rechaza me alaga de dos maneras primero me descubrió una diferencia algo que me hace único que nadie más tiene algo por lo que soy especial una pieza desconocida para todos cuyo valor es incalculable por ser irrepetible segundo porque Dios camina por el camino de los excluidos no existen seres humanos en soledad existen seres humanos ciegos que no ven lo que tienen más si ven lo que tanto les hace falta.

Hay que aprender a valorarse a uno mismo, en el mundo de la economía el valor de algo se determina por su escases y por su utilidad, Dios nos hizo a nosotros únicos somos lo más escaso que hay somos tan especiales que no hay mas nadie igual a nosotros y somos útiles por que somos lo que queremos ser y tenemos mil y un talentos pero no nos atrevemos a descubrirlos porque alguien en algún momento nos critico, no dejes que aquellos que están dañados te dañen, al contrario repáralos tu demostrándoles que la única verdadera opinión que vale es la de aquel que solo ve dentro de tu corazón.

En nuestro corazón esta lo que vales y ahí es donde están nuestros talentos y nuestras virtudes es ahí donde se demuestra lo hermoso que somos solo tenemos que mirar dentro para descubrirlo no te atrevas a sentirte rechazado a rechazar o aceptar que te rechazan más bien ve lo que hay dentro de tu corazón para demostrar lo que vales valorarte a ti mismo y darle más valor a los demás, eres el ser más hermoso que conozco porque eres hijo de un Dios que te hizo a su imagen y semejanza él es perfecto y creo diferentes copias perfectas de sí mismo por que todos somos perfectos tal y como somos solo tenemos que aprender a amarnos a nosotros.

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