viernes, 30 de septiembre de 2011

Hablemos de Justicia.

¿Por cuanto la vida?

                Si asesinara yo, a un hombre de 24 años recién graduado en Contaduría publica, blanco, evangélico, de clase media, hijo mayor de cuatro hermanos, Venezolano, soltero, heterosexual y luego asesinara a una chica de 19 años estudiante de Derecho, de piel morena, católica, de clase alta, hija única, Colombiana, la cual lleva un noviazgo de 2 años con otra mujer, ¿Cuál me hace más malo? ¿Asesinar al hombre o a la mujer?

                Hace 300 años las personas de raza negra tenían un precio como esclavos, pero los blancos eran más caros, hace 100 años un hombre podía asaltar una tienda y era condenado, pero si una mujer lo hacía podía ser eximida  de todos los cargos, en los 50 los homosexuales eran totalmente apartados por la sociedad, aun que hoy en día son mas aceptados existe la homofobia (Miedo irracional a los homosexuales), solo digo esto para ser notar que en muchos casos, lo que se refleja en tu exterior suele ser lo que determine el precio de tu vida, como si fueras un auto o una casa.



                Desprecian a otros solo porque no representan lo que somos, la cosas es: “No son como yo, entonces debo despreciarlos”, si hablamos de justicia, apartar a otros por su contextura física, esta tan mal como darle un arma a un niño de 4 años.

                Y si yo fuese el asesino del hombre blanco y la chica morena, ¿Eso me hace menos ser humano? Porque asesine a alguien que no era de mi religión y a una mujer que era homosexual, en algunos países el asesinato premeditado de dos personas se castiga con pena de muerte, pero no son tan malas las acciones conjuntas de un juez, un jurado y un fiscal, como lo han sido las mías, al ser ellos quienes determinen mi muerte.

                Realmente ¿Quien puede determinar el valor de una vida? No somos quienes para despreciar la vida de otro por su condición, ni somos quienes para decidir la muerte otros por su acción, aun que eliminas a quienes eliminan a otros por odio, llamándonos justicieros, solamente estamos odiando a quienes otros odian, aquel que hace mal por odio es apartado, pero aquel que odia al apartado se le llama héroe, entonces ¿Cual es la verdadera Justicia?

                La verdad, yo no lo sé, a veces pienso que nadie lo sabe, nunca se puede llevar justicia a uno sin herir a otros, por que aun que asesines al asesino, detrás de ti ira su hermano que tanto lo amo para hacer su justicia, es tan delgada y tenue la línea entre la justicia y la venganza, que el valor de la vida humana es difícil de determinar a veces, para nosotros en el mundo, todo depende de a quien amen menos y odien mas, ese es a quien deben eliminar.

                Nadie puede determinar el valor de la vida humana, no importa cuáles sean tus características físicas, mentales o espirituales, o cuales hayan sido tus acciones, la verdad es que en el fondo todos somos los mismos seres humanos, somos iguales, ni menos ni más que nadie, no somos obligados ni a amar ni a odiar, estamos aquí para vivir, en lo que a mí respecta la justicia se la dejo a Dios, pero en mi opinión personal prefiero morir que odiar.

Entre más ames mas te amaran y aun que al hacerlo menos te amasen, cuando te odien siempre sabrás perdonar.

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